Un paseo para descubrir la ermita de Santa María de Trujillo en Castiello de Jaca

Ermita de Santa María de Trujillo en Castiello de Jaca (Huesca)
Ermita de Santa María de Trujillo, en las cercanías de Castiello de Jaca (Huesca).

Los alrededores de Castiello de Jaca cuentan con varias ermitas románicas, entre ellas la fantástica ermita de Santa María de Iguacel, una de las joyas del románico aragonés mejor conservadas en el espectacular entorno que le brinda el fondo del valle de La Garcipollera. Pero las otras tres de las que quedan restos todavía en pie están en mucho peor estado: Santa Juliana, a la entrada del mismo valle de la Garcipollera, cuyo techo hace mucho que desapareció; San Bartolomé, en las inmediaciones de la pista que parte de Redigué, prácticamente desaparecida; y Santa María de Trujillo, en el Monte del Apóstol, también en muy malas condiciones y, además, con el camino de acceso sin señalizar.
La pasada Navidad, después de un intento fallido de llegar hasta Santa María de Trujillo a mediados de diciembre, volví a intentar localizarla con las escasas indicaciones que aparecen en un cartel interpretativo que está junto a la iglesia de San Miguel de Castiello. Fue como buscar una aguja en un pajar y la verdad es que mi esposa y yo (en estas aventurillas vamos siempre juntos… de hecho, el track del paseo que podéis ver en este post es suyo) dimos con ella de pura casualidad.
Track desde la urbanización La Luga de Castiello hasta la ermita de Santa María de Trujillo
Track desde la urbanización La Luga de Castiello hasta la ermita de Santa María de Trujillo.

Lo único que deja claro ese cartel que os he comentado es que hay que tomar el camino que parte de la rotonda de acceso a la urbanización La Luga de Castiello, en la salida del pueblo hacia Villanúa. El camino cruza el río Aragón por un puente y ahí se bifurca, o “trifurca”: de frente sube hacia el monte del Apóstol, a la derecha parte otro ramal que no sé a dónde lleva y a la izquierda hay unos ocho o nueve kilómetros de agradable paseo hacia Villanúa, que se pueden hacer a pie, en bicicleta o incluso en coche. Ese ramal es el que hay que tomar para encontrar el camino de subida hacia le ermita de Santa María de Trujillo. Nosotros no lo sabíamos y comenzamos a subir por un sendero que parecía marcado con una señal amarilla, que parte de la pista nada más cruzar el barranco de la Selva, para acabar deambulando por los antiguos campos de labor que ahora están invadidos por los árboles una vez que el sendero se borraba… aunque, por un golpe de suerte, terminamos por encontrar el camino de subida a la ermita y llegar hasta ella.
Comienzo del camino de subida hacia la ermita de Santa María de Trujillo
Comienzo del camino de subida hacia la ermita de Santa María de Trujillo desde el camino que une Castiello de Jaca y Villanúa por la margen izquierda del río Aragón. Tenéis que coger el ramal que aparece a la derecha en la foto.

Camino de subida a Santa María de Trujillo en Castiello de Jaca
El camino discurre por una zona de bosque muy chula.

Camino de subida a Santa María de Trujillo en Castiello de Jaca
En la foto no se aprecia, pero desde aquí ya se ven las ruinas de la ermita.

Subida a la ermita de Santa María de Trujillo en Castiello de Jaca
Una última bifurcación. Pilar (mi esposa) está sobre el camino que seguimos... ¡y que no es el bueno! Seguid por la izquierda, ¿vale? Ya no queda nada para llegar a la ermita.

No queda mucho del antiguo templo. Lo más sobresaliente son los restos del ábside y la puerta de acceso a la única nave rectangular, a mitad de la pared sur. Las paredes están ya muy derrumbadas y lo más probable es que unos cuantos inviernos más de hielos acaben dando con todas sus piedras en el suelo. Será una pena, porque la ermita es de unas dimensiones apreciables y tiene el aspecto de haber sido un edificio sobrio pero interesante. Correrá la misma suerte, si algún milagro en forma de asociación y subvenciones no lo remedia, como el poblado que cita la web Romanicoaragones.com que parece que se encontraba en sus inmediaciones: Artrosillo. Esta web, que os recomiendo si os gusta el tema del arte románico en Aragón, indica que esa población aparece documentada ya en 1226 y que contaba con una torre y un castillo de Gil de Atrosillo, así como una comunidad de Hermanos Peregrinos.
Portada de Santa María de Trujillo
Portada de la ermita.

Portada de Santa María de Trujillo
La puerta de la ermita vista desde dentro.

Interior de Santa María de Trujillo
Interior de la ermita.

Interior de Santa María de Trujillo. Restos del ábside
Restos del ábside, desde el interior de la ermita.

Collarada desde Santa María de Trujillo
Panorámica del macizo de Collarada desde la explanada donde se encuentra la ermita.

El camino de acceso a la ermita de Santa María de Trujillo desde la margen izquierda del río Aragón discurre por una zona de bosque caducifolio y se alfombra de hojas secas en otoño (que es de cuando son las fotos de este post). Conforme se va ganando altura bastante rápidamente las vistas se amplían y se acaba teniendo una panorámica espectacular del macizo de Collarada, al norte, y de la sierra de Angelé, al sur. También se encuentra uno con alguna sorpresa de valor etnográfico como viejas tapias de piedra seca para delimitar el antiguo camino de subida, ya medio borrado.
El paseo desde La Luga de Castiello es de apenas una hora u hora y media entre ida y vuelta; la ida cuesta arriba y la bajada al revés, para soltar las piernas… Un paseo para hacer en familia con el bocata y la cantimplora en la mochila. ¿Quién se anima?
Joaquin Ventura en la puerta de Santa María de Trujillo de Castiello de Jaca
Yo, en la puerta de la ermita. (Foto: Pilar Pérez)

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